La coordinación es una pieza clave en el trabajo en categorías menores, puesto que se convierte en la base para un buen desarrollo físico, técnico y técnico-táctico.
Las capacidades físicas coordinativas se deben plantear conforme la edad y el nivel de entrenamiento, así mismo como la metodología a desarrollar. Entre mas temprana edad se empiece a realizar un correcto trabajo coordinativo les será brindado a los niños futbolistas herramientas para poder competir y destacar en las exigencias físicas de la competencia.
Cuantas veces no hemos visto jugadores con grandes cualidades técnicas, pero al final se quedan en el proceso deportivo, en ocasiones es debido a su cambio de mentalidad, de desarrollo, y en otras ocasiones dichas cualidades no llegan alcanzar en el avanza de los procesos. Y muchas veces es ocasionado por un mayor rendimiento técnico, o movimientos motores, como lo es la técnica de carrera, la presión sobre el tiempo. O acciones tan especificas de la coordinación como lo son los perfiles, control y dirección del cuerpo, con y sin rival, así mismo como el correcto manejo de la frecuencia de paso, el desplazamiento, el controlar la perturbación, el realizar giros de una manera que no sean agresivos hacia las articulaciones o los grupos musculares. Por mencionar algunos.
Dentro del entrenamiento de base en ocasiones nos surge la pregunta de cómo planificar la parte física, si es correcto el trabajar un línea similar a las mayores o de que forma llevar un correcto trabajo del microciclo.
Y la mejor respuesta es el trabajo coordinativo en estas edades, el cual este diseñado con dos sesiones de coordinación determinadas al desarrollo y una sesión que se oriente a los juegos motrices, por que no olvidemos que el niño futbolista no deja de ser niño y el juego es la principal herramienta que le da en cuestiones de habilidad, destreza y mas puntos coordinativos.
Los demás días debería estar orientado a que el entrenador desarrolle a detalle calentamientos con balón donde genere el complemento adquirido en las sesiones de desarrollo de coordinación y la sesión de juegos motrices. En esta dos sesiones el entrenador debe generar ejercicios técnicos orientados a la coordinación, como puede ser la conducción de balón entre conos. Es decir trabajar específicamente el desarrollo de los fundamentos técnicos (Recepción, conducción, golpeo, perfiles y fildeo).
Así el entrenador podrá darle al deportista bases físico-coordinativas con y sin balón, para que el niño futbolista pueda destacar en los ejercicios, las exigencias del partido y sobre todo en construir una vida deportiva bien consolidada. Esta forma de trabajo sumado al trabajo 100% del entrenador como son técnicos y técnicos-tácticos hará que el equipo tenga una consolidación tanto individual, colectiva y grupal.
De esta manera el microciclo esta estructurado y diseñado para nuestras categorías menores.
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